¿Tu perro sufre de Ansiedad por Separación? (APS)

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Se terminan las vacaciones… uff qué cortas son! una de las cosas que más me gusta de las vacaciones es poder compartir con la familia incluyendo siempre a nuestros perros.

Es un periodo del año especial, donde aprovechamos al máximo de jugar con ellos, salir y llevarlos con nosotros a todas partes, ver una película juntos y compartir la mayor parte del tiempo. Sin darnos cuenta, estamos supliendo nuestra ausencia debido a diferentes factores (trabajo, estudios, etc), pero qué pasa ahora en marzo? Todos volvemos a la rutina, incluso nuestros perros... y alguna vez te diste cuenta si este cambio le afectó? Pueden sufrir la tan mencionada Ansiedad por Separación?

Todos hemos escuchado sobre esta patología del comportamiento. Hoy les contaré un poco sobre la APS y cómo detectarla.

Primero es importante mencionar que todas las conductas que les mencioné anteriormente (que hacemos con mayor frecuencia en vacaciones) son conductas afiliativas y son parte integral del repertorio de las especies sociales, ya que ayudan a mantener la cohesión de un grupo, por eso cuando nos separamos experimentamos respuestas emocionales, algunas veces referidas como una angustia de separación.

Esta angustia tiene como propósito aumentar la posibilidad de reunificación de los miembros del grupo (Horwitz, 2005). Tanto nosotros como nuestros perros formamos parte de un grupo social donde se crean lazos importantes que en algunos casos puede generar angustia en nuestros peludos al momento de separarnos y presentar conductas problemáticas al quedarse solos, esto es lo que comúnmente se llama APS.

¿Cómo puedo saber si mi perro sufre de APS?

Muchas veces veremos perros que se pondrán muy ansiosos al momento que su Dog Lover va a salir: pueden temblar, tratar de evitar la salida, saltar y morder las manos para buscar el contacto, caminar alrededor, etc. Cuando el dueño regresa a casa, el perro muchas veces lo va a recibir como si no lo hubiese visto en un año y no se despega de él en ningún momento, ni para ir al baño! Si pudiésemos ver a nuestro perro por cámaras cuando se queda solo, ayudaría al diagnóstico temprano y certero.

Los signos clínicos que podemos observar en perros con esta patología son:

• Vocalizaciones excesivas
• Micción y/o defecación
• Automatización (dermatitis acral por lamido)
• Hipersalivación
• Anorexia (perro que no quiere comer en nuestra ausencia)
• Vómito
• Jadeo
• Actividad motora alterada (movimientos repetitivos)
• Destrucción del mobiliario, juguetes, paredes, puerta de entrada, etc.

Todas estas conductas mencionadas, aparecerán sólo cuando el perro se queda en ausencia de su figura de seguridad, puede ser incluso en salidas muy cortas como ir a botar la basura. Los perros con APS tendrán asociado un estrés crónico, el cual afectará a su salud y bienestar (Amat et al, 2014).

Cabe mencionar además, que esto también nos traerá problemas como dueños, ya que tendremos gastos económicos por los destrozos, frustración e incluso problemas con los vecinos, los perros pueden vocalizar por horas!

¿Por qué mi perro puede presentar esto? La verdad es que no existe un solo motivo, dentro de éstos tenemos el hiper apego (exceso de dependencia), el cual puede ser primario o secundario.

El primario se da en perros que llegan a casa antes del destete y el secundario se puede generar de un momento a otro por un cambio en el ambiente, como por ejemplo una Dog Lover embarazada, pérdida de un trabajo o algo tan simple como las vacaciones, todos estos casos permiten estar más tiempo en casa de lo habitual.

El otro motivo puede ser por un miedo condicionado, o sea, un perro que tuvo una experiencia negativa cuando estaba solo en casa y ahora uno quiere quedarse sin su figura de seguridad. Por último tenemos el vínculo inapropiado, este puede ser porque el perro no tenga o no vea como figura de seguridad al propietario o todo lo contrario, que haya una sobreprotección y se tenga al perro muy consentido, potenciando enormemente la ansiedad por separación (APS) (Overall, 2013; Amat, 2016).

Ahora que ya tenemos una idea de qué es la APS y cómo detectarla, podremos tratar a tiempo esta patología tan comúnmente vista en animales de compañía y que genera estrés crónico, afectando su salud y bienestar.

Debemos actuar rápido y llevar al veterinario a nuestro perro (primero para descartar la parte orgánica) y después para que se derive el caso a un etólogo clínico.

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Por: Alma Álvarez - Médico Veterinario con Magíster en Etología Canina / Instagram: @petandwellness